Reseña de cómic – Star Trek: Red Shirts #3

      Villordsutch reseña Star Trek: Red Shirts #3…

      Se puede decir sin exagerar que la vida de una camisa roja a bordo de una nave de la Flota Estelar es una de aventuras, quieran o no. IDW Publishing sin duda nos ha abierto los ojos a la galaxia brutal en la que sirven los equipos de seguridad de la Flota Estelar. Mes a mes, vemos más y más de ellos tachados de la lista con tinta roja brillante antes incluso de que la historia haya empezado.

      No hay absolutamente ninguna oportunidad de tomar aliento en el número de este mes de Star Trek: Red Shirts. El señuelo del puesto de escucha en el inhóspito mundo Arkonia 89 resulta demasiado tentador para los asaltantes desconocidos. Nosotros, los lectores, sabemos quiénes son, pero la forma en que atacan —ataques simultáneos en la superficie y una sorpresa de andanada orbital— sigue tomando por completo desprevenidos tanto a defensores como a atacantes. Es despiadado, eficiente y devastador. Con las bajas acumulándose en ambos bandos de manera verdaderamente feroz, un tercer bando inesperado irrumpe de repente en la contienda.

      Star Trek: Red Shirts #3 es brutal. Christopher Cantwell (Star Trek: Defiant) no se guarda nada mientras elimina sistemáticamente piezas del tablero por cualquier medio necesario —tácticamente, por accidente o simplemente de forma horripilante. Sinceramente espero que no te hayas encariñado demasiado con ningún personaje en particular, porque en el mundo de Cantwell el desconsuelo llega rápido y sin aviso. Hace muchísimo tiempo que no me sorprendía exclamando «¡Oh Dios mío!» ante un cómic… pero aquí fue exactamente lo que hice.

      Una gran parte de ese impacto proviene del arte de Megan Levens (Starsigns). El mes pasado mencioné sus evidentes guiños a Tales from the Crypt; esta vez parece que a David Cronenberg le encantaría el horror que desata en un solo panel. Resulta genuinamente inquietante. También te hace darte cuenta de lo bueno que era realmente Scotty como operador del transportador, porque Star Trek IV podría haber acabado de manera muy distinta cuando la Dra. Gillian Taylor se lanzó sobre Kirk a mitad del transporte. Ahora lo sé. Y nunca podré quitarme de la cabeza esa imagen en particular de Star Trek: Red Shirts #3.

      Star Trek: Red Shirts #3 es un cómic fantástico. Lo leí de cabo a rabo sin levantar la vista ni una sola vez; la vida real no tuvo oportunidad frente a este rincón caótico, brutal e implacablemente violento de Star Trek. Es un recordatorio contundente de que las camisas rojas de la Flota Estelar siempre han luchado duro para mantener intacta la fachada pacífica de la Federación. Si aún no estás leyendo esta serie, realmente deberías hacerlo.

      Este no es un cómic para quien creyera que “Move Along Home” de Star Trek: Deep Space Nine era la cumbre del horror de Trek. No: Star Trek: Red Shirts #3 marca un nuevo y sombrío estándar de lo desastroso que puede volverse todo cuando las misiones de la Flota Estelar salen muy, muy mal.

      Calificación – 9/10

      @Villordsutch