Los 10 mandamientos del cine de los años 80

      Las películas de los años 80 establecieron algunos de los tropos más duraderos del cine.

      Las queremos tanto que los plasmamos en forma de los 10 Mandamientos, para que todos los seguidores de las películas de los 80 puedan honrarlos.

      Aquí están los 10 Mandamientos de las películas de los 80, con disculpas a Dios.

      I — No tendrás otros dioses delante de mí

      Karen Allen y Harrison Ford en Raiders of the Lost Ark. – Crédito: Paramount

      Las películas de los 80 coquetearon con todo tipo de elementos sobrenaturales, pero tendían a respetar mucho las tradiciones judeocristianas: los vampiros le temían a las cruces y al agua bendita, la gente rezaba con frecuencia y las cosas tendían a acabar mal para los adúlteros.

      Raiders of the Lost set the tone en 1981: Indiana Jones pasa una cantidad increíble de tiempo tratando de burlar a Belloq, el arqueólogo colaborador nazi que siempre está robando los artefactos que Indy se toma la molestia de localizar.

      Pero por todo el tiempo que Indy dedica a noquear nazis, al final son derrotados por el mismo Dios, cuando cometen el estúpido error de abrir el Arca y mantener los ojos abiertos.

      II — No te harás imagen tallada, porque ese es el trabajo de Kenner

      Spaceballs – Crédito: C/O MGM

      Los modernos productos de juguetería ligados al cine que comenzaron con Star Wars en 1977 explotaron en los años 80, ya que cualquier película con potencial de franquicia venía acompañada de una ráfaga de juguetes geniales.

      ¿Qué tan serio era el negocio de los juguetes? Mel Brooks contó en sus memorias, All About Me!, que cuando hizo su parodia de Star Wars, Spaceballs, mostró el guion a George Lucas, quien tuvo sólo una petición.

      “Explicó que si yo hacía juguetes de mis personajes de Spaceball se parecerían mucho a las figuras de acción de Star Wars”, escribió Brooks. “Y eso sería un no-no para sus abogados y el departamento de asuntos comerciales de su estudio. Así que me dio su bendición para hacer mi parodia satírica de Star Wars siempre que prometiera no vender figuras de acción.”

      Eso llevó a la escena en Spaceballs donde uno de los personajes de Brooks, Yogurt, revela su arma secreta:

      “¡Merchandising! ¡El merchandising es donde se hace el verdadero dinero de la película! ¡La camiseta de Spaceballs! ¡El libro para colorear de Spaceballs! ¡La fiambrera de Spaceballs! ¡El cereal de desayuno de Spaceballs! ¡El lanzallamas de Spaceballs! A los niños les encanta ese.”

      III — No tomarás el nombre del Señor en vano

      Martin Short, Steve Martin y Chevy Chase en The Three Amigos. – Crédito: C/O Orion Pictures

      En lugar de tomar el nombre del Señor en vano, las películas de los 80 ofrecieron un torrente de insultos originales, incluyendo numb nuts, dweeb y muchos, muchos más.

      Algunos de ellos no serían aceptables en el clima actual, más iluminado y contra el acoso escolar.

      Otros aguantan sorprendentemente bien, como la andanada de insultos de Steve Martin en The Three Amigos: “¡Pedazo de sonrisa comedora de tierra, cerdo chupador de escoria, hijo de una cabra sin madre!”

      IV — Acuérdate del baile, para conservarlo sagrado

      Kevin Bacon en Footloose. – Crédito: C/O Paramount Pictures

      Algunos pueblos en las películas de los 80 no permitían bailar, y eso fue genial — porque pudieron hacer una película entera sobre eso, llamada Footloose.

      Pero las películas de los 80 tuvieron muchos otros bailes increíbles, donde todo encajaba perfectamente — como el gran baile en Fast Times at Ridgemont High, el baile de graduación de Pretty in Pink donde Andie (Molly Ringwald) lleva el color del título, y el baile en Just One of the Guys donde Terri (Joyce Hyser) revela que es una chica. Y, por supuesto, el baile Enchantment Under the Sea donde Marty McFly hace de wingman para sus padres en Back to the Future. (Sabemos que, técnicamente, fue en los años 50).

      No había momento más importante en una película de los 80 que la noche del gran baile. Caray, incluso Footloose terminó con una gran escena de baile una vez que los adultos finalmente vieron la luz. Lo que nos lleva a nuestro siguiente mandamiento:

      V — Honra a tu padre y a tu madre aunque no sean tan listos como tú

      Ally Sheedy en The Breakfast Club. – Crédito: C/O Universal Studios

      Era ley en las películas de los 80 que los niños y adolescentes eran más inteligentes que los adultos — y también mejores personas.

      “Cuando creces, tu corazón se muere”, como nos enseñó Allison Reynolds de Ally Sheedy en The Breakfast Club.

      Las películas de los 80 también nos enseñaron que los niños y adolescentes son mejores que los adultos para hacer novillos (Ferris Bueller’s Day Off), casi provocar y luego prevenir guerras nucleares (WarGames), diseñar juguetes (Big), e incluso salvar matrimonios (Back to the Future).

      VI — No cometerás adulterio, especialmente mientras habitas el cuerpo de otra persona

      Michael Douglas y Glenn Close en Fatal Attraction – Crédito: C/O Paramount Pictures

      Hubo muchas películas de intercambio de cuerpos en los 80, desde Like Father Like Son hasta 18 Again! y Vice Versa.

      Aunque las películas de los 80 tenían algunas ideas dudosas sobre el consentimiento —incluyendo, a veces, no entender el concepto— una cosa misericordiosa de todas las películas de los 80 que implicaban intercambio de cuerpos era que nadie intentaba acostarse con nadie más mientras habitaba el cuerpo de otro. Bien por las películas de los 80.

      Además, las películas de los 80 eran algo antiadulterio incluso mientras habitabas tu propio cuerpo, como cualquiera que haya visto Fatal Attraction puede atestiguar.

      VII — No matarás sin decir algo divertido

      Arnold Schwarzenegger y Alyssa Milano en Commando. – Crédito: C/O 20th Century Fox

      Había muchos héroes de acción musculosos en los 80, claro, pero lo que separaba a los hombres de los chicos era la habilidad para lanzar una frase ingeniosa.

      ¿Por qué molestarse en matar a alguien si no vas a dejar también una gran réplica, como la de Arnold Schwarzenegger en Commando, cuando le preguntan qué pasó con el tipo que colgaba de un acantilado?

      “Lo dejé ir.”

      Eddie Murphy pudo haber sido el mejor comediante convertido en héroe de acción, pero Schwarzenegger fue el mejor héroe de acción que hacía comedia.

      VIII — No robarás, o un policía robot vendrá por ti

      El ED-209 en Robocop. – Crédito: C/O Orion Pictures

      A veces hay que robar algo. Por ejemplo, si estuvieras escribiendo una película en los 80, podrías robar la idea de Freaky Friday de 1976, pero con un padre y un hijo intercambiando cuerpos en lugar de madre e hija.

      Pero si robas algo, por favor asegúrate de no robarle a un colega arqueólogo, y de no hacerlo delante de un policía robot. Porque los policías robot aún no han solucionado todos los fallos.

      Podrían sobrerreaccionar — o incluso simplemente dispararte durante una demostración amistosa.

      IX — No darás falso testimonio contra tu prójimo

      Chris Sarandon, Amanda Bearse, William Ragsdale y Stephen Geoffreys en Fright Night. – Crédito: C/O Columbia Pictures

      Los vecinos eran un enorme problema en las películas de los 80 — desde los bulliciosos en Neighbors hasta los posibles cultistas en The ‘Burbs y el vampírico en Fright Night.

      Si pensabas que tu vecino en una película de los 80 era algún tipo de pervertido o villano sobrenatural, era absolutamente imprescindible que comprobaras los hechos antes de llamar a los policías robot.

      O, en el caso de Fright Night, también podías reclutar los servicios de un presentador local de televisión nocturna.

      X — No codiciarás

      Michael Douglas en Wall Street. – Crédito: C/O 20th Century Fox

      En realidad, olvida este. Como Gordon Gekko nos enseñó en Wall Street, “la codicia es buena”.

      Eh, eran los 80.

      Los yuppies reinaban en las películas de los 80, especialmente en filmes protagonizados por Michael Douglas, el propio Gordon Gekko, y Michael J. Fox, que interpretó a un aspirante a yuppie en Bright Lights, Big City y The Secret of My Success. Los yuppies en apuros fueron todo un subgénero, en películas que iban desde After Hours hasta Fatal Attraction (con Douglas otra vez).

      El género de los yuppies en peligro despegó realmente en los 90, cuando Hollywood empezó a investigar las consecuencias de toda esa codicia de los 80. Pero esa es otra lista para otro día.

      XI — Mandamiento extra

      Crédito: Universal Pictures

      La amiga de cabello castaño se robará el espectáculo.

      Mientras los héroes y heroínas de las películas de los 80 con frecuencia codician a algún personaje rubio inalcanzable, casi siempre se dan cuenta de que la persona con la que verdaderamente pertenecen es la amiga de cabello castaño que ha estado ahí todo el tiempo.

      O... simplemente tienen un encuentro muy incómodo con ella junto a la piscina.

      Robert Carradine, Courtney Thorne-Smith y Timothy Busfield en Revenge of the Nerds 2: Nerds in Paradise. – Crédito: C/O 20th Century Fox

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      Imagen principal: Fast Times at Ridgemont High. Universal.